El 24 de abril de 2014, los detenidos administrativos anunciaron una huelga de hambre masiva para exigir su libertad. Los detenidos continuarán uniéndose a la huelga de hambre si no se cumplen las demandas. En este momento hay 95 detenidos en huelga de hambre en las prisiones de Ofer, Megido y Naqab. Cabe señalar que las cárceles de Ofer y Megiddo cuentan con los servicios de la compañía británica-danesa G4S, que instaló cámaras y equipos de vigilancia utilizados para controlar a los prisioneros palestinos.
De acuerdo con un huelguista de hambre que habló con el abogado de Addameer, Mahmoud Hassan, los detenidos en la prisión de Naqab fueron trasladados a una sección aislada, separada de los demás presos. Las celdas están cubiertas de arena. Ellos han sido objeto de malos tratos; están sufriendo registros diarios en las celdas y se les ha permitido cambiarse la ropa interior sólo dos veces desde el inicio de la huelga. Están atados y esposados en sus celdas durante diez horas al día.
Tres de los huelguistas de hambre en la prisión de Naqab, Fadi Hamad, Fadi Omar y Soufian Bahar, están ahora en confinamiento solitario y el detenido Ahmad Abu Ras fue trasladado a un lugar no revelado.
Además, el Servicio de Prisiones de Israel (IPS) le ha negado la sal a los huelguistas de hambre durante estas dos semanas. Los presos que hacen huelga de hambre tienen que tomar líquidos y sal que son esenciales para la supervivencia.
La negación de la sal es una continuación de los castigos contra los huelguistas de hambre, y a pesar del grave peligro que supone para la vida de los detenidos, está institucionalizado por el Tribunal Supremo de Israel. En 2004, el Tribunal Supremo de Israel rechazó una petición de Adalah, Centro jurídico de los derechos de la minoría árabe en Israel, y de varias ONGs palestinas e israelíes que demandaban que el IPS suministrara sal diariamente a los presos en huelga de hambre, por tanto su negativa viola los derechos constitucionales del preso.
Los huelguistas de hambre podrían hacer frente a castigos más severos si el último proyecto de ley propuesto por el IPS para legalizar la alimentación forzada es aprobado en la Knesset. El memorandum depende ahora de aprobación.
Además, 42 huelguistas de hambre han sido trasladados a la prisión de Ayalon / Ramleh, incluyendo a Abd Al Rizziq Farraj y Salem Dardasawi. El 4 de mayo de 2014 sus celdas fueron allanadas y ellos golpeados. A Mohammad Maher Badr le rompieron un dedo durante el ataque y Mohammad Jamal Al-Natsheh tuvo que ser hospitalizado a causa de las heridas sufridas en el ataque. Los presos están hacinados en celdas de aislamiento, con siete huelguistas de hambre en cada una. Están en sus celdas todo el tiempo y tienen prohibidas las horas de recreo en el patio.
Addameer sostiene que las autoridades de la ocupación son las únicas responsables de la vida de los huelguistas de hambre. Addameer también exige que todas las partes contratantes de la IV Convención de Ginebra presionen a Israel para liberar de inmediato a todos los detenidos administrativos y cese el uso de la detención administrativa.
Fuente: Addameer Prisoner Support and Human Rights Association
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