6/2/2015.- En Palestino eran conscientes que el partido con Nacional no sólo iba a ser visto por los cinco mil asistentes que llegaron a Santa Laura. A 14 mil kilómetros de distancia, en Palestina, el regreso del cuadro tricolor a la Copa Libertadores después de 36 años iba a ser transmitido en vivo.
Por eso, consumado el triunfo los jugadores árabes no se olvidaron del país donde son considerados una segunda selección. "Lo teníamos presente antes del partido, fue importante saber que ellos también estarían viéndolo. Es gente que lo ha pasado mal y es lindo poder darles una alegría", afirmó el volante César Valenzuela.
Mathías Vindagossy también le dedicó palabras a los lejanos hinchas árabes. Para el ex Unión Española, "es algo increíble que nos sigan de tan lejos. Desde que supimos fue muy importante. Éramos conscientes que había que ganar también por ellos", agregó.
La sensación de estar en un club distinto al resto, es compartida por el DT Pablo Guede. "Para nosotros es un orgullo y alegría que Palestina esté pendiente de nosotros. Darle alegrías a un país que sufre cada día, con 90’ minutos de fútbol, nos llena", confesó.
Así, Palestino no sólo logró en Santiago vencer a Nacional y dar un paso importante a la fase de grupos de la Libertadores. A la vez el triunfo dejó una sensación tan distinta como impactante: Lograr que incluso cientos de refugiados en el campo de Aida en Cisjordania fuesen capaces de alegrarse con eso.
Fuente: http://chile.as.com/chile/2015/02/06/futbol/1423191670_179557.html