Mientras la comunidad internacional discute la creación del estado palestino, Israel continua la limpieza étnica y la colonización de Palestina con un nuevo desplazamiento en el Valle del Jordán.
Al Hadidiye es una comunidad beduina con unos 112 habitantes permanentes y 130 habitantes que durante el invierno vuelven a las aldeas cercanas de Tobas, ya que las fuerzas israelíes han destruido sus casas y no han encontrado los medios para construir refugios para protegerse del frió del invierno. El jueves 10 de noviembre las autoridades israelíes entregaron a esta aldea nueve nuevas órdenes de demolición contra 17 construcciones que afectarán a 72 personas, incluidas mujeres y niños.
Desde 1998 las autoridades de la ocupación israelí han implementado sistemáticamente y de modo continuo un plan para expulsar de forma permanente de sus tierras a la población palestina residente del Valle del Jordán. La mayoría de las casas de los habitantes de Al Hadidiye han sido destruidas más de cinco veces. Los refugios para los animales y otras construcciones son regularmente destruidos.
Los residentes de estas tierras también tienen prohibido tanto el acceso al agua que está controlado por la compañía israelí de agua Mekorot que abastece los asentamientos de colonos judíos, como excavar pozos, así que tienen que traer el agua de los manantiales de la zona. Especialmente en verano, las autoridades israelíes confiscan los contenedores en los cuales los palestinos transportan y almacenan el agua.
Los habitantes de Al Hadidiye dependen completamente de la cría de animales ya que no tienen suficiente agua para la agricultura. Mientras que en los asentamientos cercanos de colonos judíos de Ro'i y Beqa'ot, la producción agrícola se hace usando métodos de alta tecnología y con mucha agua. La mayoría de esta producción agrícola es exportada a los mercados europeos a través de empresas exportadoras israelíes como Bickel, Mehadrin y Arava.
Las autoridades de la ocupación justifican estas órdenes de demolición y expulsión con el argumento de que el área es una zona militar desde los años setenta. Los 600 habitantes de las comunidades de Mak'oil, Samra, Hadidiye y Humsa han vivido y criado ganado en 300.000 dunums en el norte del Valle del Jordán por generaciones y argumentan que esta área no es usada como una zona militar por Israel.
En vista de estas nuevas órdenes de demolición y desplazamiento forzoso, te pedimos que:
- Contactes inmediatamente los consulados y embajadas en Israel y en Territorio Palestino para que visiten esta aldea antes del 18 de noviembre, día en el que las órdenes de demolición serán ejecutadas, y que manden una queja a Israel a través de los canales diplomáticos apropiados.
- Incluye este asunto en tus acciones durante la Semana contra el Muro del Apartheid y el 26 de noviembre, "Retira el Apartheid del menú" día en Europa de acciones contra las importaciones israelíes.