viernes, 2 de noviembre de 2012

Un total de 22 grupos religiosos piden a la UE que boicotee bienes procedentes de los asentamientos israelíes

BRUSELAS, 30/10/2012 (Reuters/EP).- Un total de 22 grupos religiosos han pedido a la Unión Europea que prohíban la comercialización de los productos israelíes procedentes de los asentamientos hebreos en los territorios ocupados palestinos con el objetivo de que este boicot les obligue a abandonar estas colonias.

Las organizaciones han señalado que la UE es el principal socio comercial de Israel y que importa quince veces más mercancías desde los asentamientos israelíes que desde las poblaciones palestinas.

"Los consumidores europeos están apoyando sin darse cuenta los asentamientos y contribuyendo a las violaciones de Derechos Humanos", han indicado los grupos en un comunicado en el que han pedido que se prohíba su importación o que se pongan etiquetas detallando su procedencia.

Alrededor de 311.000 israelíes viven en las colonias de Cisjordania junto a 2,5 millones de palestinos. La UE asegura que las colonias hebreas construidas tras la guerra de 1967 contravienen el Derecho Internacional.

Entre las ONG firmantes de la nota se encuentra Ayuda Cristiana, la Iglesia Metodista de Reino Unido, Iglesia de Suecia o Tierra Solidaria, de Francia. Las organizaciones han pedido que se especifique claramente de dónde procede el producto, si de Israel o los asentamientos, como ya obliga Dinamarca o Reino Unido.

El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores israelí, Yigal Palmor, ha denunciado que las organizaciones tienen intenciones "políticas". "No existen estadísticas sobre las exportaciones de los asentamientos", ha asegurado, para denunciar que las cifras que ofrecen las ONG están manipuladas.

La semana pasada, el relator especial de la ONU para los territorios palestinos, Richard Falk, pidió un boicot de los productos procedentes de los asentamientos, pero el Gobierno de Estados Unidos criticó sus palabras asegurando que eran "irresponsables".

FERTILIZANTES Y AGUA

Las ONG han criticado además las demoras que sufren los productos palestinos que van a la exportación, aunque Israel asegura que se debe a razones de seguridad.

En el comunicado, las organizaciones piden que las autoridades israelíes permitan el uso de sus fertilizantes en los territorios palestinos, ya que Tel Aviv prohíbe su venta a los agricultores palestinos ante el temor a que fabriquen artefactos explosivos.

Además, han criticado la escasez de agua y la falta de acceso a la misma a pesar de que los asentamientos hebreos sí cuentan con un buen acceso. En este caso, el Gobierno israelí ha asegurado que los palestinos se han negado a coger agua para poder llegar a ser autosuficientes.

A principios de la década de 1980, las exportaciones de los bienes palestinos generaba la mitad del PIB de los territorios, pero actualmente esta cifra solo alcanza el 15 por ciento, según el Fondo Monetario Internacional.